La Guardia Civil detuvo a una mujer en la localidad española de Utiel por intentar cortarle los genitales a su marido en el transcurso de una discusión entre ambos por motivos que no trascendieron.
La mujer se encuentra en libertad tras haber declarado en los juzgados de Requena. El hombre se acogió a su derecho de no declarar contra la presunta agresora en su calidad de marido, y decidió que no la va a denunciar a su esposa.
Los hechos se remontan a la noche del pasado martes cuando un matrimonio, vecino de Utiel, inició una discusión familiar por causas que se desconocen. En un momento determinado, la mujer agarró al hombre por los testículos y le realizó un corte con un arma blanca, provocándole lesiones en la zona del escroto y en la base de la uretra, según declaró a Levante-EMV el abogado de la presunta agresora, Alfredo Moya.
El hombre llegó por sus propios medios al Hospital Comarcal de Requena con un corte en el escroto, otro en la base del pene y un testículo descolgado.
Ante la gravedad de las heridas fue trasladado de urgencia al Hospital General de Valencia donde fue intervenido quirúrgicamente en el servicio de Urología. El herido fue dado de alta en la mañana del miércoles y, en principio, no sufre secuelas como consecuencia de las heridas que supuestamente le infligió su esposa.
La presunta agresora fue detenida poco después de atacar presuntamente a su marido, aunque posteriormente fue puesta en libertad.
El miércoles declaró en los Juzgados de Requena, tras ser requerida para ello, y allí manifestó que se sentía arrepentida de lo realizado.
Así mismo, admitió que la agresión había sido incontrolada y desproporcionada, y que se desarrolló dentro de una discusión en el ámbito familiar, según su letrado.
Por su parte el hombre se acogió a su derecho a no declarar contra su esposa, a quien ni siquiera ha querido denunciar. No obstante la Fiscalía actuará de oficio contra la supuesta agresora, en cuanto disponga de los resultados del informe forense de las heridas que causó a su marido, cuya descripción, alcance y evolución determinarán la gravedad de la infracción penal de la que sea acusada.
Moya explicó que están a la espera que el médico forense emita el informe pericial. “En un principio, la herida parecía más grave, aunque afortunadamente parece ser que al final no reviste tanta gravedad”.
Además, la causa está pendiente de que el juez dictamine las correspondientes medidas civiles y penales, entre las que seguramente habrá una orden de alejamiento contra la acusada, como es habitual en estos casos.
